La Cruz Villanovense celebró estas fiestas navideñas con un partido de confraternización, que enfrentó a los directivos y a los monitores de los distintos equipos. Los primeros plantaron cara a los segundos, pese a ser todos unos profesionales, aunque el resultado fue lo de menos.
En su línea habitual, Robles ha querido valorar la labor de sus compañeros directivos y lo ha hecho en tono de humor y desendadado:
“En la portería estuvo Mario, todo un puma defendiendo los colores de su equipo. Hizo lo mejor y lo peor, paradones y cantadas impresionantes, a partes iguales, en la defensa.
Carlos, sin duda, mucho pundonor pero ¡ay amigo!, los kilos no perdonan.
Lolo: ¡como juega el tío!, se ha pegado con media provincia y no se ha despeinado.
Por la izquierda Juan Carlos, aunque éste no debía jugar, lo ha hecho muy bien, y Marcos, que llegó el último y se metió sin pedir permiso, por lo tanto hemos jugado con doce, que nos vino de lujo.
En el centro del campo Joselito e Iván. Madre mía, éstos se nota que todavía la tocan en los veteranos, repartiendo juego, cortando balones, en fin dos clones de Xabi Alonso.
Luego lo más impresionante, Mariano. Con sus años y dando ejemplo. Él por la banda izquierda, en la otra un niño como Tomy, infantil pero sin arrugarse.
Luego estaba Melchor, el tío que mejor ve el fútbol. Primero comenzó de delantero pero cuando vio lo que había se retrasó al centro del campo y acabó de central, todo un lujo.
Y para el final dejo lo más ilustrativo. Edu y Robles, fumadores, bebedores… todo lo que quieran decir, pero hemos marcado un golazo cada uno. En el mío hemos hecho el trenecito y en el suyo, que ha sido un golazo, lo hemos subido a hombros.
Otro día comentaré el equipo de monitores. Un lujazo de equipo que ha sudado la camiseta para salvar su honor. Ya veremos al final de temporada si no los hemos cesado a todos".
