El Deportivo Don Benito se llevó esta tarde tres puntos vitales tras protagonizar una remontada de raza. Venció por 3-2 a un Calamonte atrevido, que a los once minutos ya estaba por delante y además certificó la victoria tras jugar cerca de media hora con un jugador menos.
Emilio Sosa volvió a apostar por su once tipo, aunque esta vez Patri y Javi Asensio empezaron el choque en el banquillo, y el caudal ofensivo recayó en Juanlu, Cristian Beltrán, Abraham Pozo y Miguel Ángel.
El Calamonte sorprendió con un arranque muy ambicioso, presionando muy arriba la salida del balón del Don Benito y dificultando la creación de los rojiblancos, a los que les costaba trenzar pases, ya que enseguida se topaban con un jugador rival.
De hecho, apenas se habían cumplido once minutos, cuando Ñoño aprovechó el boquete defensivo por la derecha, pisó área y ante la salida de Sebas Gil, le dio el pase de la muerte a Vilorta que sólo tuvo que empujar a placer para anotar el 0-1.
El Calamonte sorprendía desde el inicio, sin embargo el Don Benito tampoco se agobió en exceso al verse por debajo y tiró de paciencia para abrir huecos, al tiempo que sabía que con el paso de los minutos esa presión asfixiante del rival se iría atenuando.
En el 17, Trinidad puso un balón en largo a Miguel Ángel, que tras pelearla con su defensor, sacó un centro-chut mordido que atrapó sin problemas el cancerbero Miguel López.
Poco después, era el calamonteño Écija el que lo intentaba con un disparo alto que se marchaba por encima del travesaño de la meta defendida por Sebas.
Y en el 24, el Don Benito dispuso de su mejor ocasión hasta el momento. Fue el argentino Cristian Beltrán el que abrió a Abraham Pozo, que remató según le vino, despejó el portero visitante y el rechace lo recogió Beltrán, pero su remate lo taponó el defensa Diego.
El Don Benito se topaba una y otra vez con una ordenada defensa del Calamonte, y por ello intentaba sacar partido a las jugadas a balón parado. En el 25, Ruby lo intentaba de falta lejana, pero su disparo se iba fuera. Y pasada la media hora, Ruby botaba un córner y tras bloqueo a un defensor, Garretas 
enganchaba una buena volea, pero su disparo se iba cerca del larguero. Una jugada ensayada que a punto estuvo de dar sus frutos.
En el 35, el Don Benito pedía pena máxima tras una caída de Ruby en el área en la disputa de un balón. Una reclamación que volvió a repetir la parroquia rojiblanca al filo del descanso, cuando tras una internada de Moruno, un defensor pareció tocar con la mano al ir a tapar el centro. El árbitro, muy cerca de la jugada no pitó nada.
Dos posibles penaltis, en medio de los cuales, el Calamonte lo intentó con un disparo de Vilorta, que enganchó según le venía, pero Sebas estuvo muy seguro atrapando.
Y cuando parecía que todo el pescado estaba vendido y los visitantes se irían al vestuario con ventaja, llegó quizás la jugada clave del partido. Ruby botó una falta en largo, al costado derecho donde Trinidad enganchó un perfecto remate que, aunque lo tocó el portero Miguel López, no pudo evitar que besara las mallas y dejara el electrónico con el 1-1 para el descanso.
El tanto dio confianza al Deportivo Don Benito, que tras la reanudación salió con hambre de gol. Sobre todo Abraham Pozo, que hizo de las suyas con el lateral Diego, que se veía incapaz de parar al punta rojiblanco.
En el 51, Pozo protagonizó la primera de las tres jugadas que hizo calcadas, hasta que consiguió su objetivo del gol. La cogió en la banda, se metió hacia dentro y su disparo al palo corto del portero se topó la primera vez con Miguel López, que envió a saque de esquina. En el 54, misma jugada del delantero del conjunto calabazón y misma respuesta del portero, aunque en el córner siguiente Miguel Ángel la ganaba y dejaba atrás para que Cristian Beltrán enviara algo.
Y en el siguiente saque de esquina, que sacó en corto el Don Benito, de nuevo fue Abraham Pozo el que se acomodó el disparo, soltó el latigazo y esta vez con un poco de suerte, ya que tocó en un defensor, el balón se alojó en el fondo de las mallas para poner el 2-1.
No se había cumplido el primer cuarto de hora de la segunda mitad y el Don Benito ya había dado la vuelta al marcador. Tras el tanto Sosa reaccionó rápido y cambió de manija en el centro del campo, sentando a Ruby y saliendo en su lugar Pelu, que dio otro aire al equipo.
En el 63, el colegiado anulaba un tanto al Calamonte, ya que Villegas cabeceó al fondo de las mallas en fuera de 
juego. Y sólo tres minutos después, en el 66, al Don Benito se le ponía un poco cuesta arriba el partido al ver Moruno la segunda amarilla, tras una falta en el centro del campo. Con uno menos, Sosa se vio obligado a retocar el equipo, pasando Ramiro al lateral izquierdo, mientras que también salió Patri por Miguel Ángel, con el objetivo de que con el capitán sobre el terreno de juego el Don Benito aguantara más el balón.
Pese a jugar con uno menos, esta vez los rojiblancos apenas lo notaron y siguieron llegando con peligro al área calamonteña. En el 70, Cristian Beltrán se marchó de dos rivales en la línea de tres cuartos, abrió a Pozo a la derecha, que se la devolvió, pero el pase del argentino a Pelu, que ya pisaba el área chica, lo despejó la defensa visitante. Y cinco minutos más tarde, eran Pelu y Pozo los que combinaban tras varios gambeteos, pero al final Abraham se escoró demasiado y a su centro no llegó Pelu.
Sin embargo, el Don Benito dejó lo mejor para el final. Corría el minuto 80, cuando Cristian Beltrán puso en pie al 
Vicente Sanz con su golazo. El argentino enganchó una volea desde fuera del área, que entró por toda la escuadra, sin que Miguel López pudiera hacer nada para evitarlo. Era el 3-1 que daba la tranquilidad necesaria a los rojiblancos para afrontar la recta final del partido sin sobresaltos.
Con este resultado, el Calamonte se vio obligado a irse arriba si quería rascar algo de su visita a Don Benito. En el 86, Álvaro lo intentó con un cabezazo que atrapó bien con una palomita Sebas y ya en el descuento, el que se erigió en protagonista fue el árbitro.
En este caso, no dudó en señalar penalti en otra acción muy discutida y que recordó a la polémica pena máxima del día del Azuaga. En este caso, el que saltó fue Garretas y ante la caída de un jugador del Calamonte, el colegiado decretó la falta. Un penalti que no falló Vilorta para poner el 3-2. Aunque el árbitro puso más ingredientes al esperpento, ya que tras anotar el tanto los calamonteños decidió pitar el final del encuentro, tras descontar tan sólo 1 minuto y 20 segundos, de los 3 que había dado de añadido. Una decisión que provocó el enfado de los visitantes y que se pudo evitar, sin duda alguna.
Al final, lo importante es que los tres puntos se quedaron en casa y de esta forma el Don Benito se mantiene en el cuarteto de cabeza con 27 puntos, los mismos que el Azuaga que tampoco falló en Montijo.
La próxima cita para los calabazones será para nota: contra el líder, Cacereño, y en el Príncipe Felipe de Cáceres.
DON BENITO: Sebas Gil, Trinidad, Ricardo Durán (Moruno, min. 23), Garretas, Gonzalo, Ramiro, Ruby (Pelu, min. 62), Juanlu, Cristian Beltrán, Abraham Pozo y Miguel Ángel (Patri, min. 71).
CALAMONTE: Miguel López, Mario, Diego (Juampe, min. 62), Villegas (Perico, min. 74), Saúl, Álvaro, Bernabé, Enrique, Ñoño, Écija y Vilorta.
GOLES: 0-1: min. 11, Vilorta. 1-1: min. 46, Trinidad. 2-1: min. 57, Abraham Pozo. 3-1: min. 80, Cristian Beltrán. 3-2: min. 91, Vilorta (p).
ÁRBITRO: Fuentes Pérez. Amarilla al visitante Saúl y a Álvaro y doble amonestación a Moruno, por lo que fue expulsado en el minuto 65.
INCIDENCIAS: Unos 750 espectadores en el Vicente Sanz con importante presencia de aficionados del Calamonte.
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