Era oficioso desde hace algunas semanas, pero desde ayer miércoles el CD Don Benito ya es oficialmente de Segunda B después de certificar su salvación tras la resolución de la RFEF con la que dejaba sin descensos esta temporada en Segunda B y Tercera. 

El cuadro calabazón, que en cualquier caso se encontraba fuera de los puestos de descenso tras la disputa de las 28 jornadas, jugará la próxima temporada, la tercera consecutiva, en la categoría de bronce del fútbol español. Un logro ante el que la plantilla del conjunto rojiblanco no duda en hacer extensiva su alegría de dejar al club calabazón en dicha categoría. También ha hecho lo mismo el club a través de un comunicado, donde ha reiterado que les hubiera gustado “acabar la temporada sobre el terreno de juego y seguir disfrutando partido a partido de otro año histórico y poder celebrarlo juntos, plantilla y afición”, pero también entienden que se trata de “una situación extraordinaria. 

En la misma línea habla el técnico Juan García, que valora “positivamente lo conseguido hasta la jornada 28 porque pone en valor nuestro trabajo”. El preparador físico, Juancho Pozo, como hombre de la casa, también señala que echará de menos “el día a día con compañeros del cuerpo técnico, jugadores, entrenos, etc”. Eso sí, reconoce que lo que más echará de menos serán los domingos de partido. 

En el apartado de jugadores, uno de los pesos pesados, Abraham Pozo, confiesa sentir un gran orgullo de poder haber conseguido por segundo año consecutivo la permanencia “por méritos propios”. También se acuerda de compañeros, directiva y afición, hacia quien lanza un mensaje de agradecimiento: “Nuestra afición siempre está, en las buenas y en las malas”. Para el atacante rojiblanco “ahora es momento de descansar y reponer fuerzas para volver al trabajo lo mejor posible cuando las circunstancias lo permitan”. 

También Manu Miquel ha querido mandar un mensaje para toda la afición del Don Benito. Eso sí, confiesa sentir tristeza y alegría a partes iguales. “Tristeza porque no podré disfrutar de la pelota hasta nueva orden y por todas las vidas que se ha cobrado este maldito virus”, señala Miquel. Por su parte, reconoce estar “muy feliz de saber que hemos conseguido dejar a un club señor como el Don Benito un año más donde se merece”. El cordobés se despide de esta temporada ansioso de poder volver a sentir “ese cosquilleo en el túnel del vestuario, cerrar los ojos e imaginar un gol de tu equipo mientras agarras a tu hijo fuerte de la mano a punto de saltar al campo”. 

El pacense Álex Herrera, que cumple su segunda temporada en el cuadro dombenitense, considera que “nadie va a disfrutar de un objetivo cumplido así, pero las circunstancias son las que son”.  Eso sí, también alaba el trabajo de todos sus compañeros para haberlo conseguido. “Tanto esfuerzo por parte de jugadores, directiva, cuerpo técnico y empleados tendrá recompensa”, señala. El central Mario Gómez, también voz autorizada dentro del vestuario, ha mandado un mensaje de agradecimiento para “toda la familia del Don Benito”.