Cuando todo parecía indicar que el próximo 18 de julio veríamos público en las gradas del Romano de Mérida en el Villanovense - Extremadura B; y el 19 de julio en el Coria - Cacereño, ahora la Real Federación Española de Fútbol ha salido al paso de la Junta de Extremadura y de la Federación Extremeña de Fútbol para poner en duda la presencia de público en esas fechas. 

Este miércoles, la territorial extremeña hizo público el reparto de entradas para los cuatro equipos, que gozarán de 1.800 cada uno y que repartirán según su criterio. El Cacereño, de hecho, ya ha comunicado que serán gratuitas para todos sus abonados. Sin embargo, la RFEF que preside Luis Rubiales emitió un comunicado señalando que para ellos “lo recomendable es que las competiciones organizadas por las federaciones territoriales también se disputen a puerta cerrada”. 

A través de una circular, la RFEF ha señalado que las competiciones de ámbito estatal, cuya organización se encuentra delegada por parte de la RFEF a las federaciones territoriales -es decir, el play off de ascenso en Extremadura-, “la RFEF entiende que lo recomendable sería que todos los partidos de los play off exprés se celebren a puerta cerrada en aras de evitar posibles rebrotes de Covid-19”. 

En este sentido, agrega el ente federativo nacional y en referencia a la decisión de la extremeña, la RFEF “llama la atención a las federaciones territoriales sobre la necesidad de mantener  todos los esfuerzos posibles en la lucha contra el Covid-19 y la necesidad de terminar la temporada en la mayor brevedad y con las máximas garantías sanitarias”. 

Por ello, además, se desmarcan de cualquier problema y aseguran que “las consecuencias derivadas de la organización de competiciones oficiales con público por parte de las federaciones territoriales serán de la exclusiva responsabilidad de éstas”.