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El coleccionismo y el fútbol, las grandes pasiones de Juan Carlos Ojeda

El deporte es una forma de vida, pero el coleccionismo también. Y ambas pueden ir de la mano perfectamente, o si no que se lo pregunten a Juan Carlos Ojeda (Villanueva de la Serena, 33 años), que desde hace varias décadas dedica la mayor parte de su tiempo libre a su gran pasión: el coleccionismo. 

Es el impulsor de la Feria Internacional del Coleccionismo de Villanueva y fiel seguidor del Villanovense, equipo al que ha seguido por gran parte de la geografía española. Por ello, hemos charlado con él para conocer más acerca de esta bonita afición que combina deporte y momentos únicos.

"La esencia del coleccionismo es ir poco a poco, ir cambiando, no comprar todo de golpe". 

¿Desde cuando eres coleccionista y de dónde nace esa afición? 

Soy coleccionista desde que tengo uso de razón. Empecé mi primera colección durante unas vacaciones famliares al País Vasco. Allí empecé a poner los típicos pines en una gorra, una gorra que cuando vine de allí tendría varias de ellas llenas de pines. una vez aquí continúo coleccionando pines y de las gorras pasaron a los corchos y con el paso de los años todo eso se quedó pequeño. A día de hoy necesito muebles para poder guardarlos. Empecé con los de Disney porque era pequeño, luego ya pasé a los turísticos, etc. Tengo de todo tipo, de política, de fútbol, turísticos, e incluso tengo colecciones concretas de pines como los equipos de fútbol, que colecciono los escudos de los equipos que militan en categoría nacional. Tengo alrededor de 14.000 pines. A raíz de ahí, como pasa con todos los coleccionistas, no me ceñí a una sola colección. Eso va en los genes y es un peligro que te regalen algo, porque a partir de ahí empiezas a coleccionar lo que sea. Cuando era pequeño coleccionaba camisetas de fútbol, sobre todo de equipos históricos. Pero claro este tipo de colecciones son caras. Era raro el día que no venía del colegio y había cambiado algo con los compañeros del colegio. 

¿Cuál es una de tus grandes colecciones? 

A nivel deportivo me siento muy orgulloso de mi colección de cromos de la liga. Tengo todos los cromos desde el año de mi nacimiento hasta la actualidad, todos sin excepción. Como gran aficionado al fútbol también colecciono entradas de fútbol. Del Villanovense, de partidos de Champions, de partidos de otros equipos extremeños u otras míticas como el partido entre el Barcelona y el Mérida, el partido de Copa del Rey del Villanovense contra el Barça y muchas otras. 

¿El coleccionismo al final es mantener recuerdos de vivencias? 

Exacto, recuerdo mi infancia cambiando cromos en el quiosco del Tio Paco. Allí íbamos los chavales jóvenes a cambiar cromos, o en el colegio abrir mi Bollycao y coleccionar el cromo. Para mi el coleccionismo era eso. 

¿Cómo surge la idea de crear la Feria Internacional del Coleccionismo de Villanueva? 

Al ser tan aficionado al coleccionismo, al ir creciendo, iba a ferias que se hacían por España. A partir de ahí conseguí muchas cosas y lo veía como algo muy positivo para la localidad a la que iba. Ahí se me encendió la bombilla y pensé que organizar algo así en Villanueva podía ser buena idea. Y mira, a día de hoy la feria es una de las más importantes a nivel nacional. Si no fuera aficionado al coleccionismo no sería capaz de organizarlo. Es una locura, porque tienes que hablar con mucha gente que viaja desde muchos puntos de España e incluso fuera de ella. El coleccionismo abarca muchas temáticas y casi todo se puede coleccionar. 

"Mis colecciones no tienen un gran valor económico, pero sí sentimental"

¿Qué coleccionas a nivel deportivo? 

Me centré en coleccionar cosas del Villanovense. Camisetas, carnets, partidos que echaban en televisión, revistas, entradas, carteles, etc. Todo esto lo conservo y este tipo de colecciones no las voy a dejar nunca. 

 

¿Y otras colecciones? 

Otra gran colección es una que tengo de Playmobil. Desde hace algunos años organizo el Belén de Playmobil que se expone en Villanueva. Me centré en las figuras del Belén, durante el confinamiento me encargué de formar figuras nuevas para que este año la exposición haya sido mucho más grande que otras ediciones. También colecciono cupones de la Once, azucarillos, marcapáginas, prácticamente de todo. 

A lo largo de estos años, ¿qué es lo que más te ha costado conseguir?

Lo más difícil fue los pines del Hard Rock Café que hacían cada vez que inaurugaban un restaurante nuevo. Los hay en todas partes, pero he hecho la locura de ir a algunas inauguraciones para poder conseguir ese pin, porque la única manera de poder conseguirlos es yendo a la inauguración. Los cromos también los tuve que conseguir a posteriori, sobre todo los más antiguos y he tenido que hacer grandes esfuerzos para conseguirlos en buen estado de conservación. Al final yo colecciono cromos desde que tengo uso de razón, y conseguir los cromos de cuando yo era pequeño fue complicado. 

El coleccionismo dejará muchas anécdotas...

Todos los años un compañero mio y yo vamos a Fitur, la feria del turismo de Madrid. Antes era muy boyante en cuanto a regalos y nos inventamos una empresa ficticia para poder ir a la inauguración, que era cuando más regalos daban. Nos hemos venido de allí alguna vez con 600 o 700 pines de países como Angola, Pakistán, etc. Allí hemos conseguido llaveros, pegatinas, acreditaciones... 

 

¿Qué colección no tienes y te gustaría tener? 

Tengo amigos que coleccionan chapas. Yo no tengo esta colección. Es una colección tradicional y me llama la atención la manera de clasificarlas. Me gustaría tenerla pero requiere de mucho espacio. Sin embargo otras colecciones como las de sellos, más pequeñas, empecé hace varios años partiendo desde el año en el que nací y al final llegué hasta 1930. 

¿Es una afición que requiere de mucho tiempo? 

Todos los días consigo una pieza para mi colección. Si voy a cualquier sitio, el ticket o entrada a un museo, lo guardo. Al final es un recuerdo y lo colecciono. Llegan cartas a mi casa y traen sello y lo guardo. En el confinamiento ordené casi todas mis colecciones y cuando junto una cantidad considerable es cuando las clasifico. En mi caso no tengo colecciones de mucho valor económico, pero para mi si lo tienen a nivel sentimental.

¿Hay muchos coleccionistas para esta zona? 

En la región hay muy buenos coleccionistas y aquí en Villanueva, Andrés Pérez, es un gran coleccionista. Él, además de ser un gran amigo mio, es una de las personas que me iniciaron en este mundo. 

¿Se puede vivir del coleccionismo? 

Hay mucha gente que vive del coleccionismo, hay empresas y plataformas que se dedican a esto. Hay gente que se dedica a vender piezas de coleccionismo mediante subastas, o venden por lotes, etc. Es algo que está en auge y la Feria de Villanueva es un ejemplo, porque cada año viene más gente. 

¿Cómo ha cambiado el coleccionismo? 

Mucho, yo recuerdo que cuando era más joven la mayoría de los coleccionistas eran gente mayor y yo siempre era el más joven. A partir de la creación de la Feria fuimos creando una 'cantera' y hemos creado muchos nuevos coleccionistas. El primer año la gente lo veía más como una exposición, pero a lo largo de los años se han ido adentrando en este mundo.

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