El dombenitense Antonio Morcillo, agente de la Policía Local de Villanueva de la Serena y conocido cariñosamente como ‘Tocino’, se ha ganado el pasaporte para participar en el Campeonato del Mundo de Fisioculturismo Natural que se celebrará el primer fin de semana de octubre en Madrid.
‘Tocino’ tiene 37 años y practica el fisioculturismo natural desde hace 24 años. En su trayectoria deportiva salpicada de esfuerzo y sacrificio ha proclamado en cuatro ocasiones campeón de España y recientemente, a finales de mayo, se proclamó subcampeón nacional. Fue en una competición en la que participaron catorce deportistas.
Ahora tiene la ocasión de ver cumplido su sueño de participar en el campeonato del mundo que se celebrará en la capital madrileña. Una participación que se ganó tres ser quinto de Europa en el campeonato continental que se celebró en Italia. En este caso, se clasificaron diez de los treinta participantes que acudieron a la cita en el país transalpino.
Todo un reto el de clasificarse para el mundial y que ya consiguió el año pasado. Algo nada fácil ya que Antonio Morcillo compite en una de las categorías más duras, la de 70 a 80 kilos y en la que también influye la altura del culturista.
Se cumple así su sueño de conseguir ir al europeo y una vez allí haberse clasificado para un mundial en el que asegura que tiene “buenas posibilidades” y de hecho confía en quedar entre los primeros.
Respecto al entrenamiento, Morcillo indica que él mismo se encarga de hacerlo, lo hace en casa y también cuida la dieta, que en general es muy estricta y más aún a dos meses de cualquier competición.
En su disciplina, lo que más valoran los jueces es la simetría del cuerpo, así como el tamaño y la definición del músculo. Por ello, Antonio lucha a diario para tener la menor grasa posible en su cuerpo, a base de una dieta muy ligera en la que todo va pesado hasta el último gramo. Por ejemplo, de desayuno suele tomar 75 gramos de arroz y trigo integral, mientras que en la comida y la cena apuesta por 75 gramos de arroz hervido y 350 gramos de pechuga a la plancha.
En definitiva, una dieta que se centra en muchas proteínas y pocos hidratos de carbono, siendo sus alimentos básicos el pollo y el arroz, alimentos que tienen que ser pesados y siempre comerlos hervidos. Estos alimentos se complementan con tortillas de clara de huevo, fruta y leche de soja. Una dieta muy estricta “a la que te acabas habituando”.
Lo que tiene claro desde que practica este deporte es su apuesta es por el fisioculturismo natural, que consiste “básicamente en dieta y entrenamiento, sin tomar ningún producto que potencia el entrenamiento y la musculatura”.
A pesar del sacrificio, reconoce que esta actividad le reporta muchas satisfacciones y también recompensas como es el caso de haberse ganado una plaza para el mundial en octubre próximo.
