Se ha convertido en una tradición, pero los atletas e integrantes de ‘Villanueva corre y mucho’ lo volvieron a hacer. En concreto, lograron completar en una mañana los 84 kilómetros que separan Villanueva de la Serena de Guadalupe en una ruta por relevos.
En concreto, fue el pasado domingo 14 de septiembre cuando más de cuarenta componentes del club hicieron esta actividad que les llena de gran satisfacción: “Los que allí hemos estado creo que las hemos disfrutado y cuando pasen los días y desaparezca el cansancio nos quedará otro gran recuerdo”.
Como aseguran en su blog "unos la han hecho en bicicleta y la mayoría corriendo, unos veteranos, otros novatos, unos en la élite, otros en la media, pero todos con ilusión, pues sin ella todo es imposible y con ella todo se puede conseguir".
El primer relevo, compuesto por siete componentes, partía a las 5 de la mañana de la calle Virgen de Guadalupe de Villanueva y en dos horas se plantaron con un ritmo vivo en la estación de Campo Lugar. Allí les esperaba un segundo grupo, bastante más numeroso, dispuestos a recorrer los 23 kilómetros que tenían asignados hasta la estación de Zorita para dejar el testigo a otros compañeros que cubrirían el camino hasta Cañamero, pasando por la Estación de Logrosán.
El cuarto tramo, el que termina en Guadalupe, es el más corto de toda la ruta, pero también el más dificultoso ya que transcurre por la ruta de Isabel la Católica y muchos kilómetros hay que hacerlos prácticamente andando. Así, dos horas y media tardaron en llegar a las calles de Guadalupe, donde todo el grupo les recibió con gran algarabía para enfilar todos juntos camino al santuario en cuyas escalinatas se hizo la foto oficial de participantes y familiares.
La actividad terminó con una comida de convivencia en Guadalupe.
